El cinturón de seguridad no solo protege tu vida, también protege tus derechos. Aunque parezca un detalle menor, no usar el cinturón en un accidente puede suponer una drástica reducción o incluso la pérdida total de tu indemnización.
¿Qué pasa si sufres un accidente y no llevabas el cinturón?
Aunque el accidente no haya sido tu culpa, si se demuestra que no llevabas el cinturón, la aseguradora puede aplicar una reducción en tu indemnización. ¿Por qué? Porque consideran que tus lesiones podrían haber sido menos graves o incluso evitadas de haberlo utilizado.
Esta reducción puede aplicarse en función de la gravedad del daño y de cuánto se habría podido mitigar con el uso del cinturón. En casos extremos, se puede llegar a perder el derecho a cualquier compensación, considerándose negligencia grave.
¿Cuánto se reduce la indemnización?
No existe un porcentaje fijo, se analiza caso por caso. Si, por ejemplo, llevabas el cinturón y aún así sufriste una lesión grave, tu indemnización será completa. Pero si no lo llevabas y tus lesiones se agravaron por ello, puede haber una reducción proporcional. En situaciones muy graves, se ha llegado a denegar la indemnización por completo.
¿Y si el accidente fue culpa del otro conductor?
Incluso en ese caso, si no llevabas cinturón, tu comportamiento puede considerarse «culpa concurrente», y la aseguradora tiene derecho a reducir la compensación. El cinturón está diseñado para minimizar el daño, y no usarlo agrava las consecuencias, lo que legalmente se interpreta como una parte de responsabilidad por tu parte.
Embarazadas y cinturón obligatorio
Muchas personas piensan que las embarazadas están exentas del uso del cinturón. Nada más lejos de la realidad. La ley exige su uso, y además existen adaptadores especiales para garantizar comodidad y seguridad.
¿Y las multas?
Además de los riesgos físicos y legales, no llevar cinturón implica una multa de 200 € y la pérdida de 3 puntos del carné. Los pasajeros adultos también pueden ser multados directamente, y si el pasajero es menor, la responsabilidad recae sobre el conductor.
El cinturón de seguridad es obligatorio, salva vidas y protege tus derechos. No usarlo puede suponer el agravamiento de tus lesiones y la pérdida parcial o total de la indemnización que te correspondería tras un accidente.
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